No sufrir, e ir de mano de los acontecimientos o ser consciente sufriendo en la consciencia. De aquí,a actuar, un esfuerzo más.
Dejarse llevar por el río se llega inexorablemente al mar si no se intenta encallar antes o nadar hacia la orilla.
De ahí ¿la importancia del sufrimiento?. ¿La clave del sufrimiento?.
Claro está que no importa el cilicio si en la corriente se abandona el ¿sufriente?
¡Qué felicidad!. ¿Hasta cuándo?
Igual una vez desembocado es difícil llegar a la orilla.
En una ocasión como ésta, no por ser más, nos salvamos o salvados por quienes sí tuvieron el coraje de sufrir luchando contracorriente. Como suele ser costumbre.
Igual no está en los intereses de los posibles socorristas nuestro auxilio sino todo lo contrario.
Igual no hay celebración de llegada, pues ya celebramos bastante con nuestra adaptabilidad a las diferentes (a) normalidades.
Cuanto mejor le fuera en el trayecto más adentrado en la mar del destino.
La misma corriente que supo coger, le adentró.
La rutina adquirida. Le adentró.
Ya no es un punto muy visible y distinguido . Se difumina en la inmensidad.
Ser o dejar de ser.
Dejarse llevar por la corriente.
o almenos intentar llegar a la orilla.
y pedir ser rescatado antes de perderse en la desembocadura.
De momento no hay algo más "divertido" . Pero solo de momento
Difícil, luego o casi imposible, surfear las olas esta vez.
Seguramente luego "desaparecido", sin rastro.
El haber sido un "buen surfista" esta ocasión....
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Comentarios correctos . Echémonos medio siglo atrás. Gracias.