Si les digo que los
programas de televisión con niños, acerca de la cocina es una
explotación encubierta como concurso y es forma de dirigir a España
a los servicios, olvidándonos de la industia, su diseño
y la innovación fuera de la culinaria.
Pensamos es un
programa que engancha, pero somos políticamente incorrectos y queremos evidenciar estos hechos al público.
NOTA: Se percibe fustración, competividad LABORAL.
Lo políticamente correcto
De la misma forma afirmar un Madrid inseguro en los 80, cuando ¿los artistas?, posteriormente reconocieron públicamente que lo fue pero no era políticamente correcto afirmarlo y si encambio negarlo.
Lo políticamente correcto
De la misma forma afirmar un Madrid inseguro en los 80, cuando ¿los artistas?, posteriormente reconocieron públicamente que lo fue pero no era políticamente correcto afirmarlo y si encambio negarlo.
Afirmar que los
animales han de vivir en cuadras, fincas y nunca en pisos, también hace de cualquiera alguien políticamente incorrecto. afirmarlo acerca de los de
gran tamaño, confinados en edificios, que pudieran ser a su vez,“especies
exóticas” con los que convivir, tanto dueños como sufridos convecinos. no es políticamente correcto.
Seguro que ya muchos
nada querrán escuchar de esta entrada Es políticamente
incorrecta.
Afirmar que la
Fiesta Nacional es la mínima de las torturas, sin comprender la
razón de por qué, los "defensores de la vida animal" no insisten en
presentarse en los mataderos, (muerte animal en cadena) y les preocupe
más que cuando sus conciudadanos han de rebuscar en basuras, o sufran
maltrato económico, psicológico.....
Una postura en contra del maltrato al ser humano, no parece ser mas políticamente correcta que frente a un animal. Gana poder si procede de una fuente “progresista” .
Lo gracioso del caso es que seguramente descubran, aunque “nunca” reconozcan, han trabajado para quien suponían muchos su antítesis .
Una postura en contra del maltrato al ser humano, no parece ser mas políticamente correcta que frente a un animal. Gana poder si procede de una fuente “progresista” .
Lo gracioso del caso es que seguramente descubran, aunque “nunca” reconozcan, han trabajado para quien suponían muchos su antítesis .
Ser nacional es
políticamente incorrecto, así como afirmar que apellidos como
Suarez, González, Fraga, junto a otros muchos no son o fueron valuarte de
España, si no lo contrario, y comentar de otros, puede que esté, hasta prohibido.
Denunciar que los
sindicatos filiales a partidos son negocios con intereses en
desempleados y catapultas personales, no es políticamente correcto,
así como criticar el sistema electoral.
Recordar los "gobiernos" que adoptaron los contratos basura, la entrada en la O.T.A.N, ( ¡y de qué forma!) etc....etc...no es políticamente correcto.
Recordar los "gobiernos" que adoptaron los contratos basura, la entrada en la O.T.A.N, ( ¡y de qué forma!) etc....etc...no es políticamente correcto.
No cabe duda que el COMPLEJO de lo políticamente correcto enmudece en muchas ocasiones. Es forma de manipulación.
¿Quienes hasta ahora, manipulan o ha decidido lo que es correcto o no admitir en nuestras vidas?.
Evidentemente es el arma de, y para el kamikaze.
¿Quienes hasta ahora, manipulan o ha decidido lo que es correcto o no admitir en nuestras vidas?.
Evidentemente es el arma de, y para el kamikaze.
El ser y sentirse racional, lógico, en público, hace cambiar la leve balanza de la “opinión
pública”, de nuestro entorno, mundo laboral y personal.
Desde conquistar el
cariño de una muchacha, a atrevernos a dar nuestra opinión en tertulias,
oficinas, obras, facultades, institutos o talleres.
Poner en juicio a un
“leader”
no suele ser políticamente correcto, tanto hoy como ayer, y repito:
¿Quienes han manejado hasta ahora, a la opinión pública para llegar a dicho extremo?.
¿Quienes han manejado hasta ahora, a la opinión pública para llegar a dicho extremo?.
Declararse homófugo u
otras posturas semejantes, no solo no son políticamente correctas, puede que
prohibidas.Independentista encambio, no tiene precio.
La “cinta
americana” nos viene a la boca cuando se nombran
sentimientos locales, discriminación, solidaridad u otra serie de
palabras más que aprendidas.
Por otro lado se olvida, la soberanía nacional, la razón, la democracia auténtica, la cooperación, el hombre y la implicación de organismos públicos.
Por otro lado se olvida, la soberanía nacional, la razón, la democracia auténtica, la cooperación, el hombre y la implicación de organismos públicos.
Está bien ser
solidario con el niño perdido de fuera, pero no sin antes rescatar
al que mas cerca tengamos.
Ser ONG no es
sinónimo de limpieza , de necesidad, ni de colaboración.
Los COMPLEJOS de lo
polítiamente correcto se manifiestan desde el acto de lucir una
bandera extranjera en la cartera, la toalla, el vehículo, obviando
antes la propia, hasta la negación a llamarse progresista, pues,
según parece, el término posee dueños y está mal visto lucir la
insignia de su nación y afirmar que se apuesta por el progreso.
Nos dicta, que nunca
un intelectual puede ser patriota de su nación, aunque sí, siempre que se refiera a su comarca .
Quien con orgullo sea español no ha de ser por fuerza solidario, caritativo ni humanitario. Está relegado necesariamente a los "progresistas", socialistas, por supuesto.
Bien, construyamos y dejémonos de palabras. Rompamos todos y cada uno esta brecha. Quitémonos la "cinta americana de la boca".
Comencemos, asumamos en público el término progresista junto a nuestra insignia nacional. pues queda demostrado a donde nos ha traído lo políticamente correcto, su confusión y engaño por lo que de ingeniería social le corresponde.
Quien con orgullo sea español no ha de ser por fuerza solidario, caritativo ni humanitario. Está relegado necesariamente a los "progresistas", socialistas, por supuesto.
Bien, construyamos y dejémonos de palabras. Rompamos todos y cada uno esta brecha. Quitémonos la "cinta americana de la boca".
Comencemos, asumamos en público el término progresista junto a nuestra insignia nacional. pues queda demostrado a donde nos ha traído lo políticamente correcto, su confusión y engaño por lo que de ingeniería social le corresponde.