Mientras el economista inglés despega, sufro oscuridad informática de diálogo
e información.
Los kamikazes del siglo XXI nos arrastran a una perdición que rechaza nuestro
sentido de libertad y mente, pues tenemos ojos para ver y oídos para escuchar que
nos cierran como la actualizada figura de los tres monos: ni oír ni ver y callar.
la esperanza individual se ciñe a no ser arrastrado y continuar cuerdo , que
el tiempo pase como en otras ocasiones, pero ésta es excepcional pues la opinión
ha quedado legada a la imágen y sonido, compartido por miles.
Delegada nuestra seguridad, nuestro abastecimiento básico,..etc..
Nuestros delegados nos tendieron una trampa que ahora han cerrado.
la única salida debiera de ser romper nuestros contratos, pero para legitimar
nuestra postura ha de ser al unísono y alejados de toda comodidad.
Los navegantes de uestra reciente historia no han sido pilotos experimentados
son y fueron acreditados sin ningún tipo de dicho crédito, pero como la nave no
se perdió nadie antepuso la lógica a su vida.
Hoy queda claro que pocos
apreciamos nuestra libertad, luego, nuestra vida.
Quienes acaudalan pocos valores de vida , éso tienen que perder y
arrastran a los vivientes al cadalso junto a ellos, para no sentirse diferentes,
Para igualarnos a la baja y que nuestro final sea tan pobre como el suyo.
No denota ninguna inteligencia, un estúpido egoísmo suicida.
Cuando te arrastran al abismo su miedo a reconocerse les empuja
a desear identificarse con tu imágen no la suya, hacer tu sufrimiento el suyo.
No son éllos, no son tú, no son NADIE.
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Comentarios correctos . Echémonos medio siglo atrás. Gracias.